Vuelvo a darme la bienvenida a mí misma al mundo blogger después de dos meses de ausencia! He estado trabajando en Canadá y Estados Unidos éste verano, y después pasando mis vacaciones entre Marbella, Barcelona, y Marrakech. Como véis, ¡no me puedo quejar! Además, todos estos viajes me han aportado mucha "experiencia gastronómica" de la que os iré contando poco a poco.
Entrado Septiembre, toca vuelta "al cole", y hoy os traigo otra entrada de la sección "De Moda", ésta vez, sobre los tan, valga la redundancia, de moda, cocktails de diseño.
Empezaré diciendo que no soy una gran bebedora. Ni en cantidad ni en variedad. He probado de todo, pero cuando me apetece tomar una copa, siempre me inclino por el clásico Ron Negro con Coca-Cola, o en verano, un buen Mojito o un Daiquiri de frutas. Pero no me saquéis de ahí... Aborrezco el Whisky, no soporto el Vodka, y no me emociona la Ginebra.
Y tampoco me gusta beber en grandes cantidades, suelo disfrutar de una copa en buena compañía y sin pasarme, me parece innecesario y me resta bastante diversión, la verdad.
Borracheras aparte, que todos las hemos cogido alguna vez, parece que últimamente estamos asistiendo a una especie de moda de pedir el cocktail más elaborado, raro y con más matices que haya en cualquier bar.
Yo he tenido ocasión de servir y tomar bebidas en ambientes bastante VIP, y opinio así. Y me pregunto ¿son necesarios veinte minutos para preparar un simple Gin Tonic? ¿Cambiará mucho tu vida el hecho de que el limón esté cortado un milímetro más ancho o más grueso? O, digo yo, ¿no dependerá más eso de la combinación de una buena tónica, una buena ginebra, un poquito de limón, y se acabó la historia?
Llamadme paleta, o lo que queráis, pero creo que es algo meramente de "postureo" que se dice tanto ahora. Pagar 12, 15 o 20€ por lo que antes se pagaba al precio de una copa normal, me parece absurdo. Y más aún, gente que se las da de entendida, y, con todo mi respeto, tiene poca idea. Otra cosa es pagar ese extra por un cocktail elaborado, con muchos ingredientes y frutas... puede ser hasta entendible.
Si el tema me da para tanto, es porque no hace mucho tuve la ocasión de acudir a una cata de Gin Tonics en el hotel Gourmand Valdepalacios, un hotel 5***** cuyo restaurante cuenta con Estrella Michelín, y donde nos hicieron hasta Gin Tonics con fuego... aquí os dejo la foto de uno de los que nos prepararon:
Todo esto siempre desde el humor, pero una cosa es la moda, y otra la sensatez. Anda ya, al que me distinga un Gin Tonic con aires frutales y matices ácidos de uno con matiz floral y tónica aireada... le doy un premio! :-P
Bienvenidos a mi blog... y Gracias por leerme :)
"Comer es un placer."
Coincido en que en esto del gintonic hay mucho postureo. No dudo de que existan muchos matices dependiendo de como se prepare, pero de ahí a diferenciarlos bien... hay que tener mucho paladar.
ResponderEliminarMe parece mucho más auténtica, por ejemplo, la moda de la cerveza artesana, donde realmente si se aprecian diferencias entre los distintos tipos sin necesidad de ser un gran entendido.
Yo también prefiero el típico cóctel de toda la vida cargado de fruta, o un mojito, mi favorito!! :D
Si nos pusiéramos científicos, el grosor del limón para que aporte la cantidad de acidez ideal, dependería del limón en sí mismo... en fin. Chorradas xD.
ResponderEliminarLa verdad que has tenido un verano más ajetreado que el mío xD. También estuve en EEUU trabajando (8 semanas) y luego en Mallorca de vacaciones (3 semanillas :)). ¡¡Y yo pensando que mi verano había sido un lío!!